Dentro del mercado actual, existen muchas variedades en cuanto al hardware que se puede montar en un ordenador. Cada modificación influye, en menor o mayor medida, en el rendimiento de nuestro equipo. Hace tiempo parecía que lo más importante era el procesador, posteriormente la memoria RAM tomó protagonismo, y ahora de lo que no se para de hablar es de las unidades de almacenamiento SSD. Y si, las llamamos unidades de almacenamiento porque depende de la que montemos lo podremos llamar «disco duro» o no.En realidad, debemos fijarnos en cada uno de los componentes y saber como se comportan unos con otros. Además, a la hora de elegir un ordenador tenemos que pensar muy bien para qué se va a utilizar. No es lo mismo un ordenador para un programa básico de contabilidad, que para un complejo sistema de diseño gráfico en 3D.
Por poner un ejemplo, ¿quién no ha visto a alguien con un portatil de más de mil euros que solo lo usa para facebook? Está bien, y no es para nada criticable, pero podemos decir que no es la mejor manera de optimizar su rendimiento, ya que se estarán infrautilizando sus posibilidades.
La principal diferencia entre una unidad SSD y un disco HDD es, como hemos mencionado antes, que a la unidad SSD no la podemos llamar Disco. Físicamente no es un disco, sino que se trata de una unidad de almacenamiento. No trabaja girando como tradicionalmente han trabajado los discos, sino que es estática. Para hacernos una idea, sería como una tarjeta SD o un pen drive. Para escribir o buscar información, el disco duro tiene que girar, y el lector o aguja, buscar donde está guardada la información. Un SSD simplemente ofrece la información, sin movimiento.
Por otro lado, las unidades SSHD son una mezcla de ambas. Podíamos pensar que esto aunará las ventajas de las unidades SSD y las de los discos HDD, pero por el mismo motivo, también las desventajas. Como veremos a continuacion, el resultado no siempre es igual a la suma de los dos factores.
Es una unidad de almacenamiento estática, rápida y eficiente. Su nombre de «estado sólido» nos indica que nunca está en movimiento. Básicamente sirve para lo mismo que cualquier otra unidad, pero la diferencia está en la manera de funcionar.
La ventaja más significativa de este sistema es su velocidad. Son hasta 8 veces más rápidos que los HDD, y por eso harán que el funcionamiento sea mucho más fluido.
Son más duraderos debido a que no se encuentran en movimiento y el desgaste es menor.
La información que guardamos en nuestro SSD, está más segura que en un disco HDD. Hay menor riesgo de rotura por un golpe, etc. Esta ventaja lo hace ideal para ordenadores portátiles.
Aunque no de manera muy significativa, si que podemos decir que su tamaño es menor que el de los discos duros. Los ordenadores de Apple y algunos Ultrabook suelen usar discos de este tipo, lo que ayuda a tener un diseño muy ligero y fino.
El ruido que generan los HDD actuales no es muy elevado, pero los SSD no generan nada.
Es difícil encontrar desventajas a este sistema, pero como todos los sistemas, tiene un punto débil, y este es el precio. Cuando salieron, los SSD tenían precios desorbitados, y en cuanto un modelo de ordenador lo montaba, el precio subía muchísimo. Con el paso del tiempo, las cosas se han ido normalizando, cada vez más usuarios compran unidades SSD, y por lo tanto desciende el precio. De todos modos, aún se encuentran lejos de los HDD, y como cabe pensar, serán siempre más caros porque indudablemente son mejores.
Este disco es el tradicional, el de toda la vida, el típico disco que gira, y como si de un vinilo se tratase, se lee (y escribe) mediante una especie de aguja.
Su principal ventaja es el precio. Por el mismo dinero podemos encontrar un SSD de 120 Gb y un HDD de 2 Tb.
Si necesitas gran capacidad de almacenamiento y no vas a necesitar usar programas que consuman muchos recursos, un ordenador con un HDD puede conseguir satisfacer tus necesidades por mucho menos. Esto puede suponer una gran ventaja, puesto que tendrás mucha más capacidad para guardar todo tipo de archivos.
En caso de ser un ordenador fijo, las desventajas de tamaño, fragilidad y similares, no tendrán gran importancia y deberíamos desestimarlas.
Aunque puede tener una capacidad enorme, los procesos funcionarán más lentos, ya que requiere de un movimiento físico del disco y el lector. Estos movimientos, aunque de manera muy reducida, suponen una disminución de la durabilidad del disco.
Son unidades mucho más frágiles. Un golpe puede causar un daño irreparable y la consiguiente pérdida de información. Siempre es recomendable tener copias de seguridad externas, pero en el caso de tener un HDD esto cobra una mayor importancia.
Para ordenadores portátiles ocupan más espacio, hacen ruido y pesan más. Para este tipo de ordenadores, en los que generalmente no necesitamos tanta capacidad, lo mejor sería montar un SSD. Aunque claro, si tampoco necesitamos un gran rendimiento y lo único que buscamos es una usabilidad básica, con un HDD tendremos suficiente.
Como posible solución a la diferencia entre SSD y HDD surge el SSHD, un híbrido que busca aunar todas las ventajas de los dos tipos de unidades. Funcionan con un pequeña unidad flash, tipo NAND, y una unidad de disco duro tradicional.
Aunque no llega a la velocidad de los SSD, bien es verdad que supera con creces a los HDD. Esta es su mayor ventaja, y hace que el funcionamiento sea fluido.
Su precio es bastante menor al de los SSD, y casi se asemeja al de los HDD.
Su uso es ideal para ordenadores fijos en los que no nos importe el tamaño, ruido o fragilidad de sus componentes, dado que va a estar protegido y sin moverse.
Si queremos gran capacidad, muy buen rendimiento y un precio competitivo, esta es la solución.
En este caso, la velocidad y rendimiento es la única desventaja que no comparte con los HDD.
Al seguir siendo un HDD al que le agregamos algo, sigue siendo más grande, frágil y hace ruido. No es la mejor solución para portátiles que vamos a mover mucho, pero si puede ser una solución alternativa para lograr mayor rendimiento con gran capacidad.
Si estamos dudando entre un SSD, un HDD o un SSHD, lo primero que tenemos que pensar es el uso que le vamos a dar a nuestro ordenador ¿Cuáles son las aplicaciones que usamos habitualmente? ¿Necesitamos mucha capacidad? ¿Nuestro ordenador es fijo o portatil?
Una vez resueltas estas preguntas, yo eliminaría el HDD, puesto que es el que mayores desventajas tiene. También hay que contemplar que es más barato, pero la diferencia con los SSHD es muy pequeña.
La pregunta entonces sería ¿SSD o SSHD?
2 Comentarios
CREO QUE LOS SSD SON LO MAXIMO EN TECNOLOGIA VERDADERAMENTE SON LOS MAS RAPIDOS DEL MERCADO
Lei un articulo sobre ssd, en caso que lo utilices como disco externo, podria llegar a perder voltaje con el paso de los meses y causar perdida de información,,, es esto verdad? porque una memoria usb, puede estar meses y no pasa nada, ¿?